LA GRAN INSEGURIDAD DE GRAN VIA
No hay más que caminar por Gran Vía para comprobar cómo la gente se «cuela», por el bulevar central o utiliza la zona del tranvía para atajar e ir más ràpido. La cuestión es que estas zonas se encuentran llenas de maquinarias, agujeros y diferente material por lo que es peligroso transitar por ellas. Nuestro grupo político ha solicitado más seguridad en Gran Vía para los peatones ya que aún no está recepcionadas las obras por parte del Ayuntamiento. Es decir, que en el caso de que ocurra algo, el ayuntamiento no puede hacerse cargo de ninguna inmdenización. También hemos pedido, ya de paso, que se restituyan las paradas de autobuses suprimidas. Es necesario que vuelvan a poner la parada de autobús de la Gran Vía de Zaragoza, a la altura de Pedro Cerrada como estaba antes. Gran Vía necesita esta parada suprimida ya que hay demasiada distancia entre la primera, situada al lado de la Facultad de Económicas hasta Fernando el Católico, a la altura de Bretón. En total 900 metros entre una y otra.
Esta calle abierta, hace tres días, se enfrenta ahora también a otro problema y es el denso tráfico que soporta ahora porque todo el tráfico que había antes se ha vuelto a llevar a Gran Vía pero con el problema de que, ahora, sólo hay un carril. Por eso, desde CHA pedimos que agilicen el tráfico en esta vía con itinerarios alternativos y con presencia de la policía de tráfico porque puede haber problemas para el paso de ambulancias que no pueden pasarse al carril del tranvía, en caso de urgencia, debido a que está todavía ocupado con maquinaria pesada. Y, también de paso, que arreglen las calles adyacentes que han sido utilizadas como vías alternativas para el tráfico de autobuses. Su masiva presencia han dejado los suelos hechos unos zorros. Un poco de alquitrán en forma de operación asfalto especial no vendría mal.