CHA denuncia el abandono de las cercanías de Zaragoza por parte del Partido Popular


INICIATIVAS EN EL CONGRESO
Por todo ello, CHA ha registrado ya una batería de preguntas en el Congreso de los Diputados, a través de su diputado Chesús Yuste, que estamos esperando que se contesten y vamos a interpelar a la ministra en sede parlamentaria para que se ponga las pilas y nos diga qué está pasando con la estación.
También, en segunda instancia, CHA presentará varias iniciativas en las Cortes de Aragón para preguntar al Ejecutivo por las cercanías de la ciudad, ya que para el Gobierno aragonés era prioritaria la estación de Plaza (Platafoma Logística) y no existe y al consejero de Obras Públicas, Rafael Fernández de Alarcón, «le interesa más el tranvía de la ciudad para bloquearlo que las cercanías que deberían ser una de sus prioridades. El pleno del Ayuntamiento de Zaragoza también registrará otra moción a este respecto.
En estas iniciativas, CHA exigirá al Gobierno de Aragón que firme el protocolo sobre infraestructuras ferroviarias y cercanías para la ciudad de Zaragoza porque creemos que no tiene ninguna intención política de sumarse a ese protocolo. Hará mal, porque mantiene una visión partidista de ese protocolo al estar pensando más en el PP que en la ciudad de Zaragoza.
Al respecto, Martín ha subrayado que este protocolo suscrito por el Ministerio de Fomento y el Ayuntamiento «generará una serie de estudios y de propuestas que no tienen color político, que son importantísimas para Zaragoza y para el sur de la ciudad, para Arcosur, Plaza, Cuarte, y todo el enlace hacia el sur del área metropolitana» de la capital aragonesa y, en este caso, «el PP, como está haciendo con casi todo, está aplicando una visión torticera y partidista a la hora de plantearse las cercanías del entorno de la ciudad de Zaragoza».
Por último, el portavoz de CHA ha avanzado que solicitarán de nuevo en el Consorcio de Transportes la integración tarifaria que «nos parece absolutamente necesaria para que funcione el sistema de movilidad integrado entre el tranvía, los autobuses y el cercanías, como funciona en cualquier capital del tamaño de Zaragoza».
Martín ha concluido al remarcar que «no estamos pidiendo la luna, pedimos aplicar el sentido común y el mismo trato que en el resto de ciudades, nada más».