2013: DISCURSO DE JUAN MARTIN EN EL DEBATE DE LA CIUDAD
DEBATE SOBRE EL ESTADO DE LA CIUDAD 2013
Autoridades, Señor Alcalde, compañeros y compañeras de corporación, amigos y amigas, buenas tardes.
Hoy, si me permiten, mis primeras palabras son de recuerdo y homenaje a las mujeres asesinadas víctimas de la violencia machista una lacra social ante la que nadie puede permanecer indiferente.
Quiero comenzar la intervención de hoy agradeciendo a los trabajadores y trabajadoras municipales, a todas las entidades sociales, de infancia, de juventud, de tiempo libre, a las de cooperación para el desarrollo, a los miles de voluntarios de esta ciudad que colaboran en decenas de organizaciones, su labor.
Zaragoza les debe a las zaragozanas y zaragozanos que de forma silenciosa están aportando lo poco o mucho que tienen, un reconocimiento formal, esta ciudad sería mucho peor de lo que cabría esperar en estas circunstancias, si no fuese por su esfuerzo. Son también ellos los que trabajan por el bien común desde los valores de la generosidad, la compasión, la cooperación, la honestidad, la solidaridad, desde la responsabilidad social y lo hacen con confianza en un futuro mejor.
Estos últimos 30 meses, dos años y medio ya de mandato, han sido duros, muy duros, en términos sociales y de empleo. Ha aumentado un 11% el desempleo en la ciudad. Hemos perdido más de 7.000 empleos en solo dos años, que se han venido a sumar a los más de 56.000 desempleados.
En 2013 se ha superado una barrera simbólica: el 49,5% de la población zaragozana tiene dificultades para llegar a final de mes. “Los más débiles” son ya la mitad de la población y las dificultades son especialmente graves para ese 19% de la ciudad, uno de cada cinco zaragozanos, se encuentran en situación de riesgo de pobreza o exclusión social.
Esa es la foto de una ciudad sitiada por las políticas del Partido Popular. La foto que cada día se percibe con mayor nitidez desde la aldea gala en la que se ha convertido Zaragoza.
Y hago referencia en exclusiva a nuestra sociedad civil y al Ayuntamiento porque con ese entorno y con esa realidad social, el resto de administraciones públicas deberían haberse sentido llamadas a establecer mecanismos, no solo de intervención pública, también de prevención social.
Nada más lejos de la realidad. El sitio de las políticas populares a la ciudad se ha concretado, no solo en el recorte drástico de los niveles de inversión del conjunto de administraciones públicas en Aragón, (la inversión del Estado ha caído un 31,16% en los últimos tres años y el presupuesto del Gobierno de Aragón, un 43,30%), también de todos los programas de sociales y educativos, intentando convertir el estado de bienestar en un espantajo irreconocible.
Debido a la imposición de políticas liberales, la inversión real del presupuesto municipal se ha contraído en casi 68.000.000 de euros en cinco años (un 60%), pasando de 113 millones de euros a 45 millones en 2013. Hemos retrocedido más de 15 años en capacidad de inversión, 6 años en empleo público, 5 años en capacidad de incidir sobre la economía de la ciudad, es decir, cinco años en construcción de ciudad, una ciudad que no invierte en su gente, y en sus barrios, retrocede.
Retrocede en igualdad, en cohesión, y en priorizar el elemento clave de una ciudad: su ciudadanía. Y todo ello se lo debemos de agradecer, fundamentalmente, a la prohibición de inversión que el Gobierno de España ha impuesto a la ciudad de Zaragoza y a la puesta en marcha de un pensado y elaborado paquete de involución social que directamente ignora a más del 20% de nuestra sociedad. Son los daños colaterales de unas políticas inhumanas y ajenas a la igualdad.
En España hoy la democracia ha adoptado la forma del Decreto-Ley, el proceso recentralizador es furibundo y ajeno a cualquier lógica de la sensatez y la prudencia. Hoy la democracia solo la pueden interpretar adecuadamente los déspotas de nuevo cuño.
Ante esa situación y en un entorno de continuos cambios normativos en el ayuntamiento de Zaragoza, solo cabían dos opciones: esconder la cabeza detrás del acta de concejal o arrimar el hombro en las cuestiones económicas y sociales fundamentales. Bueno realmente cabe una tercera opción: emponzoñarlo todo, mentir, tergiversar, intentar convertir cada uno de los mejores objetivos políticos en una caricatura de si mismos.
Hoy, dos años casi y medio más tarde, y después de tomar una decisión política difícil como la de darle a Usted la Alcaldía de la ciudad, somos conscientes, a tenor de los resultados obtenidos, que tres son más que quince y que la decisión fue la correcta.
CHUNTA ARAGONESISTA en esta tesitura ha optado por pensar en lo único importante: la ciudadanía. Hemos intentado llegar a acuerdos en los asuntos más relevantes. Lo llevamos haciendo desde el principio y continuaremos hasta el final de la legislatura. Somos muy conscientes de que no estando en el gobierno de la ciudad muchas veces tres son más que diez.
Vamos a huir de frentismos, de trincheras. El elemento central de la acción política, al menos, la de CHUNTA ARAGONESISTA en estos meses ha sido la construcción del bien común, del bienestar, de la redistribución de la riqueza social, y va a seguir siendo ese.
Hoy es hora de hacer un repaso de los acuerdos alcanzados con CHUNTA ARAGONESISTA, y a ello dedicaremos los próximos minutos.
En materia económica, se han sentado las bases de un adelgazamiento del gasto no productivo en los presupuestos de 2012 a 2014, redimensionando el gasto total del ayuntamiento. Comenzamos con el abandono de la realización de grandes eventos, continuamos con la reducción del gasto corriente y el número de estructuras municipales sin destrucción de empleo, pasando por las salida del capital de sociedades mixtas no prioritarias y eliminando, hace unos días, las dietas de los concejales por asistir a los consejos de administración de las sociedades municipales.
A propuesta de CHUNTA se ha neutralizado el impacto de la subida del IBI, tanto para los propietarios de vivienda, como para los comerciantes, cuyo valor catastral de sus viviendas y locales sea inferior a 70.000 Euros. Propusimos y se alcanzó, un amplio acuerdo para la congelación de la subida de impuestos y tasas el 2014. Desde aquí mi agradecimiento a los grupos municipales del PSOE y de IU por el mismo.
Se han puesto en marcha todas las propuestas que hemos planteado relacionadas con las nuevas políticas sociales: el empleo, la vivienda y el emprendimiento. La asistencia a las familias más desprotegidas, ha sido el elemento central, mediante los programas de alquiler de vivienda, de complemento de becas de comedor, de creación de ayudas al pago de la luz, el gas o la calefacción, de rehabilitación de viviendas y alquiler social, todos ellos han alcanzado un importe cercano a los 11.000.000 de euros en tres años.
Hemos conseguido poner en marcha actuaciones que supondrán en el corto plazo nuevos yacimientos de empleo y la puesta en valor de otras actividades productivas, como el proyecto Agros de recuperación de la huerta tradicional o el arranque de la primera experiencia de venta de subsuelo público para aparcamientos.
Se ha comenzado con una sostenida línea de apoyo económico al sector cultural y a las empresas culturales por un importe en tres años de 1.700.000 euros. En materia de recuperación de nuestras señas de identidad se ha dado un importante impulso al reconocimiento de todas las manifestaciones culturales de contenido y raíz nítidamente aragonesas.
Se han alcanzado acuerdos sobre el desarrollo de piezas urbanas claves para el futuro de la ciudad consolidada como el proyecto Casco Universitario para dotar de actividad, entre otros, el edificio de los juzgados de la Plaza del Pilar.
Estos acuerdos se han ido cimentado sobre la base del respeto a la palabra dada y el cumplimiento de lo acordado, teniendo en cuenta que no hay cheques en blanco y que los acuerdos hay que alcanzarlos uno a uno. Colaboración, sí, apoyo, cuando toque, pero sobre todo responsabilidades compartidas cuando éstas se hayan pactado con anterioridad. Creemos, de esta forma, haber contribuido a que el Gobierno del PSOE mire a la izquierda.
Señor Alcalde, estamos a 30 meses ya del inicio de su actual mandato, lo cual hace absolutamente necesario realizar un repaso de los aciertos y desaciertos de su gobierno, y porque no decirlo, también a los de Chunta Aragonesista en la medida que ha colaborado en la toma de algunas de esas decisiones.
Queremos trasladarle una idea central: no podemos seguir al tran, tran. A esta ciudad no le sirve la modorra. Sacúdase la modorra, esa que se le pone a Usted cada vez que entra por la puerta del ayuntamiento. Las ciudades que no avanzan retroceden y no vemos detrás de su gestión un modelo, una propuesta, un relato.
No podemos seguir en el ayuntamiento de Zaragoza con una evidente crisis de ideas y con ausencia de liderazgo claro. No puede ser que para alcanzar acuerdos en el día a día valga todo con tal de superar el Pleno municipal, para después esperar a que escampe. No hay impulso político en su gestión.
Usted tuvo un modelo de ciudad hasta el 2008, se podía compartir o no, con sus luces y sus sombras, pero ahora Zaragoza necesita más que Etopia, pantallas de plasma y realidad virtual.
Haciendo un repaso a sus apuestas políticas en este mandato, sus grandes objetivos eran y son:
Repensar y generar un nuevo modelo de desarrollo para la ciudad, favoreciendo la integración en la vida urbana de los nuevos desarrollos residenciales de Arcosur y Parque Venecia y la revitalización de aquellas zonas del Centro Histórico que más lo necesitan.
Mantener del empleo público, adaptando la estructura municipal a una nueva situación. En materia de desempleo: impulsar al máximo los mecanismos de apoyo al emprendimiento y favorecer directa o indirectamente las iniciativas empresariales y los proyectos capaces de generar o sostener la actividad económica en la ciudad.
Crear un mecanismo de garantía para favorecer el acceso de los autónomos a microcréditos que permitan su supervivencia.
La puesta en marcha de una política fiscal basada en la progresividad de los impuestos, para exigir un mayor esfuerzo a quien más tiene.
La elaboración de planes integrales para todos los distritos y perseguir el objetivo de conseguir una Zaragoza sin barreras, una Zaragoza sin barreras arquitectónicas.
Establecer una estrategia de movilidad basada en: el transporte público, la promoción del uso de la bicicleta y de los recorridos peatonales, la reducción de los desplazamientos en vehículo privado. Incluía: el inicio de los estudios para una segunda línea este-oeste, la extensión del servicio Bizi a todos los distritos, el impulso a la red de cercanías en colaboración con el Ministerio de Fomento y el Gobierno de Aragón, y la reordenación de la red de autobuses.
El desarrollo de la nueva estrategia cultural para 2020.
Como apuesta estrella del debate de hace un año: poner en marcha de un pacto de ciudad para frenar la exclusión social creada por el paro, los desahucios y los recortes de las prestaciones públicas.
El resultado, como veremos, hasta ahora no ha podido ser más desigual. Empecemos por el final, es decir por lo más importante: el pacto de ciudad para frenar la exclusión social. No tenemos ni estructura ejecutiva singularizada de emergencias, ni atención singularizada a los focos exclusión, ni medidas urgentes en materia de vivienda: ustedes reparten comida…. Que no digo que este mal, pero todos esperábamos mucho más. Es que, Señor Alcalde, lo que hace un año se presentaba como la mayor de las respuestas a la crisis social desde el socialismo zaragozano hoy no tiene ni reflejo en una estructura operativa singularizada que tenga capacidad de respuesta URGENTE.
Sin anuncios grandilocuentes, ni grandes pretensiones, sí que creo que en su haber se encuentra el haber mantenido los colchones sociales, las políticas sociales y educativas, pero la intensidad de las mismas se ha debido al esfuerzo conjunto de muchos, entre ellos, de mi grupo municipal. Entre todos hemos conseguido hacer girar sus políticas hacia la izquierda.
Nada tenemos ni de la elaboración de planes integrales, ni de la estrategia para la cultura en el 2020, ni de los microcréditos para autónomos, ni de la nueva estructura municipal.
No tenemos la prometida Ordenanza de transparencia y la participación ciudadana se ha convertido en un monótono “dar cuenta” en los consejos de ciudad y en el habitual reparto de subvenciones.
El gran reto de la movilidad no avanza: no tenemos plan de cercanías, no tenemos ampliación del servicio bizi, no hay recorridos peatonales, no tenemos aparcamientos disuasorios. Tenemos, eso sí, un estudio técnico para la segunda línea del tranvía, que en realidad es para media línea y que no tiene ningún tipo de sostén económico ni financiero.
¿Para cuándo la revisión del Plan de Movilidad Sostenible elaborado en el 2006 y cuyo horizonte se agota en 2015? Hoy las circunstancias han cambiado, se ha avanzado mucho, pero es imprescindible repensar colectivamente la orientación que le queremos dar a la movilidad de la Zaragoza del futuro inmediato y analizar los nuevos escenarios.
En materia de gestión de los servicios públicos, hace ahora un año le decíamos, y hoy le volvemos a reiterar, que uno de sus fracasos ha sido la no consecución de apoyo financiero privado para acometer el nuevo modelo de gestión de la depuración y el saneamiento en Zaragoza. Solo hace unos días hemos visto desaparecer la sociedad municipal más efímera que la ciudad ha conocido: SERMUZA. Seguimos esperando, un año más tarde que se materialicen los préstamos necesarios para relanzar su actividad y acometer las necesarias inversiones.
Siendo cierto, como es, que una buena parte de la responsabilidad en su paralización la tiene el Partido Popular, también lo es que si no es por el tejido social y CHUNTA ARAGONESISTA el actual ciclo de depuración y saneamiento no sería 100% público, ni habría avanzado hasta la actual situación.
En el capítulo de los fiascos también hay que situar la gestión de la nueva contrata del transporte urbano. Lo que iba a ser un modelo supuestamente pactado con las entidades vecinales y sin pérdida de puestos de trabajo, al menos eso se decía a comienzos de año, ha resultado ser un desastre en términos de empleo, con más de 150 trabajadores despedidos, y otro desastre en el mantenimiento de los consensos vecinales mínimos.
Mi grupo municipal puso toda la carne en el asador a la hora de defender los puestos de trabajo, lo hizo y lo volvería a hacer. ¿Qué credibilidad pública puede tener quien dice defender a los trabajadores si después cuando se echa a la calle a 153 calla y mira para otro lado? Ninguna.
Hemos demostrado que se pueden ajustar los costes de una empresa sin recurrir a despedidos definitivos. Lo hemos demostrado con el bus. Se puede hacer, siempre que se den los factores necesarios: contribución empresarial recortando sus beneficios, aportación de los trabajadores y mantenimiento de las condiciones de rentabilidad económica del servicio público.
En el apartado de los logros de su gestión está, sin ninguna duda, el haber conseguido mantener los servicios públicos prácticamente sin recortes en un entorno económico y político que lo hacía muy difícil. El haber mantenido el empleo municipal en su práctica totalidad y ello sin recortes salariales más allá de los planteados por el Partido Popular. Usted ha cumplido lo acordado y ello ha contribuido a que se haya mantenido el acuerdo de investidura que posibilito su llegada a la Alcaldía.
Le tengo que reconocer que no es fácil trabajar en un entorno económico lleno de incertidumbres, al que se suma el estado de sitio inversor de Madrid y el Pignatelli para con la ciudad, y el obstruccionismo del Partido Popular municipal. Su capacidad de influencia política ante el Gobierno de Aragón y el de Madrid ha sido ninguna, no cabía esperar otra cosa de la nula lealtad institucional de los gobiernos de la derecha, pero si que esperábamos que, como mínimo, se desatasque de una vez el proyecto de ley de capitalidad, cosa que no ha ocurrido.
Sr. Alcalde, pero también es una cuestión de interés. ¿Por qué no le pone la misma rasmia, la misma fuerza, a resolver estos problemas que a darle pellizcos de monja a la dirección de su partido?
Planteaba hace unos minutos, al comienzo de mi intervención, el necesario agradecimiento al tejido social de la ciudad. Esa sociedad civil que se mueve fundamentalmente por los valores que crean bien común.
Los cambios que se avecinan en la arquitectura institucional de los municipios y la profunda transformación que están viviendo nuestras sociedades hacen esperar que nuestra ciudadanía nos exija liderar las causas que ellos ponen encima de la mesa, causas ciudadanas.
Causas basadas en la consecución de mayores cotas de calidad de vida, de bienestar, de acceso en condiciones de igualdad a todos los derechos sociales, causas que ahora y en el futuro versaran sobre el reparto de las cargas y los beneficios que nuestra ciudad genera, causas que buscan incrementar la participación en la cosa pública y la transparencia de las instituciones.
Asistimos estos meses a un intenso e importantísimo debate sobre la racionalización de las competencias propias e impropias de los municipios, pero la ciudadanía lo que quiere es saber si, independientemente de si las competencias las presta el Gobierno de Aragón o el ayuntamiento de Zaragoza, la ciudad, este espacio social que compartimos, avanza como tal en dignidad humana, en solidaridad, en sostenibilidad ambiental, en justicia social, o en participación ciudadana y transparencia, y la ciudadanía quiere cooperar para conseguirlo y lo quiere ya.
Mi grupo municipal quiere plantearle hoy a Usted y al resto de la corporación un cambio de enfoque que haga a la ciudadanía protagonista de las grandes decisiones que toma la ciudad. Un cambio de enfoque destinado a poner en sus manos la construcción de lo común.
Un cambio de enfoque destinado a poner en valor, también en lo económico, a las empresas y entidades económicas zaragozanas que asuman un compromiso activo de construcción del bienestar colectivo, a través de la realización de un balance con elementos y prácticas económicas auditables, y que ya ha sido puesto en marcha y estandarizado por el movimiento de la Economía del Bien Común.
Y ese cambio de enfoque tiene que ver con el establecimiento de mecanismos que nos ayuden a alcanzar cuatro objetivos:
1.El primero, la creación de un sistema objetivo y externo a la estructura municipal que ayude a medir los avances o retrocesos sociales, los avances en la construcción del bienestar general, del bien común de toda nuestra ciudad.
Sistema que tiene que articularse por la sociedad civil en torno a la elección de los factores de calidad de vida que se consideren más importantes. ¿En qué marco? En el que ustedes quieran, nosotros proponemos que sea el nuevo Consejo de Ciudad el que los decida, pero estamos abiertos a cualquier propuesta.
Una vez decididos colectivamente esos factores, anualmente se medirá su grado de cumplimiento mediante la elaboración de una macroencuesta ciudadana que determinará su nivel de progreso y la adecuación al cumplimiento de los mismos de las políticas públicas, las del ayuntamiento de Zaragoza y las del resto de instituciones.
El objetivo es determinar colectivamente qué factores de calidad de vida, de construcción del bien común, son determinantes para nuestra ciudadanía, priorizarlos, establecer un horizonte de revisión de los mismos, más allá de los ciclos electorales, y medir de forma objetiva e imparcial anualmente su grado de cumplimiento. Vamos a medir si nuestra sociedad avanza o no en la dirección que ella decida.
2.El segundo: el establecimiento de un sistema de incentivos para todas aquellas empresas y organizaciones de carácter económico de nuestra ciudad que asuman como propio y por escrito las prácticas y el modelo de gestión de la Economía del Bien Común, realizando anualmente un Balance de su aportación al Bien Común.
Estos principios se basan en una matriz de gestión empresarial ligada a cinco valores: la dignidad humana, la solidaridad, la sostenibilidad ecológica, la justicia social, junto con la transparencia y la participación ciudadana, que deberán aplicar a: la gestión ética de suministros y finanzas, la calidad del trabajo y la reparto justo de su carga, limitación de las horquillas salariales (entre sueldo máximo y minimo), democracia interna en la empresa y en la toma de decisiones, entre otro elementos.
3.La tercera pata. La Agenda Local 21 zaragozana ha determinado ya que la huella ecológica actual de la ciudad es de 5,2 hectáreas globales per cápita, entendidas como nuestro nivel de consumo de recursos naturales. Si tenemos en cuenta que el ritmo con el que el planeta es capaz de abastecernos es de 1,8, cada zaragozano genera un déficit ecológico de unas 3,4 hectáreas globales, lo cual significa que nuestra huella ecológica es enorme y que debemos poner en marcha de forma urgente políticas públicas que reduzcan nuestro impacto ecológico global.
Para ello es necesario continuar con el programa global que analiza las principales actividades económicas, ofrecer un diagnóstico y utilizarlo para establecer un plan a diez años de reducción de la huella ecológica de la ciudad. Somos conscientes que la principal causa se encuentra en la utilización de combustibles fósiles y plásticos por eso creemos que es absolutamente imprescindible articular la revisión del Plan de Movilidad Sostenible como una de las piezas esenciales para reducir la huella ecológica de la ciudad.
4.El cuarto y último elemento. Es absolutamente imprescindible dar apoyo económico a la Investigación, el desarrollo y la innovación ligados a la Universidad de Zaragoza. Hay en estos momentos proyectos lo suficientemente interesantes en el seno de nuestra universidad como para que el Ayuntamiento de Zaragoza se vuelque en su apoyo, lo único que les falta es apoyo financiero, que alguien les avale durante los cuatros primeros años de vida.
Creemos que se puede articular una línea de avales por hasta 1.000.000 de Euros que puede gestionar la Fundación Zaragoza ciudad del conocimiento. La Fundación y la Universidad tienen los medios técnicos y humanos como para que elegir los proyectos empresariales de investigación y aplicación tecnológico por los que se pueda apostar.
Tenemos que apostar por nuestros jóvenes, tenemos que apostar por nuestra universidad y la mejor forma de hacerlo es avalando económicamente los microproyectos empresariales que nacen de una buena idea.
Hoy planteamos un consenso sobre estas cuatro propuestas básicas al resto de fuerzas políticas. Sin precipitación, sin prisas, iniciando todos los estudios y los procesos de consulta y consensos previos a su puesta en marcha durante el 2014. Buscamos amplios consensos ciudadanos, pero sobre todo, buscamos poner en el primer nivel de decisión política a la ciudadanía, buscamos que sus decisiones orienten y gobiernen el quehacer político cotidiano. No buscamos sustituir a las instituciones pero si buscamos que la ciudadanía exprese de forma clara cuales deben ser los principios y los valores rectores de nuestra ciudad en un horizonte temporal amplio que contribuyan a aumentar nuestro bien común.
Queremos que sea el Ayuntamiento el primero en dar ejemplo y poner a sus “empresas” a trabajar para poder ser experiencias piloto para toda la ciudad con respecto a la elaboración de un Balance anual de contribución al bienhttp://www.elblogdecha.org/wp-admin/post-new.php#edit_timestamp común, por eso vamos a proponer, a través de las propuestas de resolución, que las seis sociedades anónimas municipales se incorporen al programa de empresas de la Economía del Bien Común, realizando anualmente un balance del mismo, y siendo auditadas de forma externa.
Y sobre esos objetivos básicos paso a señalarles cuáles van a ser las propuestas políticas singularizadas que va a seguir mi grupo durante el próximo año, y que se van a incardinar, no podría ser de otra forma, en los principios generales que les acabo de exponer.
1.Apuesta por una reforma estructural amplia de los servicios y la plantillas de la ciudad y ello como resultado de la aplicación de la Ley de reforma de la ley de Bases de Régimen Local, sobre la base del acuerdo con la representación sindical y el mantenimiento de la totalidad de los puestos de trabajo.
2.Ofrecimiento de negociación de las Ordenanzas Fiscales y del Presupuesto Municipal del 2015 en el segundo trimestre del 2014, para conseguir así sacar de la contienda preelectoral la negociación presupuestaria. Creemos absolutamente necesario tener presupuesto municipal en el año 2015. Más allá de cuestiones electorales es fundamental que la ciudad no se pare ni un solo mes, y es fundamental que los sectores vinculados con las políticas de acción social y de empleo tengan un horizonte económico claro en el 2015.
3.En materia de empleo público indirecto creemos absolutamente imprescindible llegar a amplios acuerdos para que los procesos de revisión y puesta en marcha de las contratas municipales se salden con 0 despidos definitivos. Apostaremos por la reducción del tiempo de trabajo y el reparto de esfuerzos económicos entre todas las partes implicadas.
4.En materia de promoción del empleo y políticas sociales, hemos alcanzado acuerdos para dar continuidad a los planes de empleo social, de rehabilitación de viviendas y emprendimiento social.
En esa línea vamos a proponerles hoy que nos apoyen en la puesta en marcha del pago de alquileres en especie para todos aquellos inquilinos de viviendas sociales de Zaragoza Vivienda que no pueden total o parcialmente pagar sus alquileres por razones coyunturales. Saben Ustedes que es una posibilidad que se ha introducido este verano en la Ley de Arrendamientos Urbanos. Es útil para sus comunidades, pues la horas de trabajo se invierten en los inmuebles, es útil a la sociedad municipal y, sobre todo, es útil para las personas que temporalmente no pueden afrontar el pago de sus rentas.
5.En materia de cultura y patrimonio, creemos que hay que seguir apostando por los creadores y creadoras zaragozanas como elemento central a la hora de crear identidad, de generar contenidos, elemento fundamental para ser identificados en la sociedad del s. XXI. En Zaragoza el sector cultural es un importantísimo elemento de creación de empleo y dinamización económica.
6.El proyecto del Casco Universitario. Nuestra apuesta, junto con el tejido comercial y la Universidad, saben ustedes que es darle vida al edificio de los antiguos juzgados lo más pronto posible. Cada día que pasa sin actividad va muriendo un poco más el tejido comercial y económico del casco histórico y tenemos un proyecto para evitarlo. Podemos dotar a nuestro Casco Histórico de una seña de identidad estratégica, que lo visibilice, que lo recalifique.
Durante este 2014 vamos a seguir trabajando por sumar apoyos, por generar consensos y así hacer ver al Gobierno de Aragón que es lo que quiere la ciudad para esa zona.
Y con esto termino. Hemos esbozado nuestras apuestas políticas, nuestras prioridades: transformación social, acción pública como elemento dinamizador de nuestra sociedad, cambio de valores en la gestión, empoderamiento de la ciudadanía.
En ellas y sobre ellas esperamos construir consensos con nuestra ciudadanía, con todos Ustedes. En ese escenario 31 serían mucho más que 16, pero si solo es posible con 16, para nosotros ya serán suficientes.
Muchas Gracias.