El Gobierno Municipal está gastando 4 millones de euros indebidamente
¿Tú, o usted, qué hubieras elegido, pagar el crédito durante el año, como corresponde y ahorrarse cuatro millones de euros o no pagar nada del crédito durante un año entero con el fin de disponer de ese crédito, pero con un coste de cuatro millones de euros? Nuestro grupo municipal prefiere ahorrar esos cuatro millones a las arcas municipales pero el gobierno de la ciudad no. El vicealcalde Fernando Gimeno ha preferido no pagar en este próximo año las cuotas del crédito ICO dado por el Gobierno del Estado para financiar el pago a proveedores porque quiere disponer de ese dinero para pagar las facturas escondidas en los cajones, las que no tienen consignación presupuestaria. Sería loable si no resultara tan caro disponer de este «remanente de tesorería», este dinero en caja proveniente del crédito. Tal y como ha dicho Carmelo Asensio esta mañana. La opción elegida por Gimeno es una de las tres ofrecidas por el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas para refinanciar el plan de pago a proveedores al que el consistorio se acogió en 2012. Un crédito destinado a abonar 171 millones de euros de facturas pendientes que nos está saliendo por más que un «pico» a los zaragozanos y zaragozanas.
Como decimos, el gobierno municipal ha optado por la fórmula que amplía de dos a tres los años de carencia, con la actual amortización a diez años y un tipo de interés que pasa del 5,5% actual al 4,22 % y que supondrá pagar en intereses 34 millones de euros con un ahorro de 7 millones de euros.
Pero pensamos que hay otra fórmula, como dijimos en la pasada comisión de Economía y Hacienda y que el PP se lanzó rápido a copiar, que permitiría un ahorro de 11 millones y mantenría los periodos de amortización y carencia, de 10 y dos años, respectivamente a un interés del 4,13 %.
La tercera posibilidad también la hemos descartado porque supondría duplicar el tiempo de amortización y carencia, que pasaría de 10 a 20 años y de 2 a 4 años, respectivamente, y una interés del 5,12 % pero obligaría a aumentar las tasas y precios públicos, lo que supondría, además de una subida desorbitada de piscinas, centros deportivos, es decir, todos los servicios, una intervención del Ministerio de Hacienda en la autonomía municipal.
Por eso criticamos que Gimeno sacrifique el ahorro de 4 millones de euros a ganar un año más de carencia en los préstamos. Es decir, dar una patada hacia adelante, pero sin suponer un ahorro neto. Este ahorro neto se produce con la fórmula defendida por CHA porque permite un ahorro total en los diez años de 11 millones de euros, frente a los 7 millones de ahorro que supondrá la opción elegida por el Gobierno de Zaragoza. Queremos un informe económico que exponga las ventajas de la fórmula elegida por Gimeno, que es un pésimo gestor para las arcas municipales porque no ha optado por la opción que conlleva más ahorro para el Ayuntamiento.
Tal y como ha dicho Carmelo Asensio, esta forma de ganar tiempo del vicealcalde se puede plasmar en aplicar al listado de facturas pendientes los millones de euros que se adeudan a Tuzsa. Esta cuantía se vería en parte recogida con los diez millones de euros que este año habría que pagar del plan de pago a proveedores y que al acogerse a la refinanciación de un año más de carencia trasladaría el inicio de los pagos a 2015, año en el que se celebran elecciones municipales. ¡Ahí estamos!